Preguntas frecuentes
¿Quieres saber más sobre nuestro trabajo?
Estas son algunas de las preguntas más comunes que recibimos de vecinos, clientes y solicitantes de empleo. Siempre estaremos encantados de responder cualquier consulta adicional o reservarle un recorrido por nuestras instalaciones.
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El carbón activado es el producto que utilizamos en nuestros filtros. Puede elaborarse a partir de cualquier materia prima rica en carbono, incluido carbón, madera o incluso cáscaras de nueces o huesos de frutas.
Para “activarlo”, o darle capacidad depurativa, lo calentamos a temperaturas muy altas en un horno especial. Esto se hace sin oxígeno, por lo que se carboniza en lugar de quemarse. Para crear los poros se introduce vapor: ¡es como una sauna!
Durante la filtración, estos poros absorben las impurezas del aire y el agua como una esponja. Este proceso se llama adsorción.
Después de la saturación, el carbón es tratado en nuestros hornos de reactivación. Las impurezas se desorben y destruyen por completo, y el carbón suele reactivarse para su reutilización. Este proceso circular impulsa la sostenibilidad del carbón activado, reduciendo la huella de carbono tanto de DESOTEC como de nuestros clientes.
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El carbón activado es una tecnología muy extendida que se utiliza para lograr estrictos estándares de purificación en muchas industrias.
Se utiliza en filtros para purificar agua, líquidos, emisiones al aire y gases en muchas industrias, incluidas la farmacéutica, la de biogás, la manufacturera y la de remediación.
Permite que estas industrias y muchas otras cumplan con las leyes ambientales que protegen nuestro planeta para las generaciones futuras.
También es probable que su propia casa contenga carbón activado en electrodomésticos como filtros de agua y campanas extractoras de cocina. ¡Realmente es un método de filtración muy versátil, probado e inofensivo!
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La salud y la seguridad son las principales prioridades para DESOTEC y tenemos décadas de experiencia y conocimientos para mantener seguros a nuestros trabajadores y vecinos. Nos aseguramos de utilizar carbón activado de una manera que no presente ningún riesgo para la salud.
Nuestras instalaciones están equipadas con sistemas de extracción para minimizar el polvo. Nuestro personal está capacitado y equipado para manipular carbón activado de manera segura y es monitoreado durante las operaciones para garantizar que permanezca protegido en todo momento.
El carbono residual se almacena cuidadosamente y todas las emisiones de nuestros procesos industriales se monitorean continuamente para garantizar que solo salga vapor de agua inofensivo por la chimenea. Eso significa que el aire, el agua y el suelo alrededor de nuestras instalaciones permanecen limpios en todo momento, sin presentar problemas de salud para las personas que viven cerca.
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Una vez que los clientes devuelven los filtros a nuestras instalaciones, se vacían, revisan y limpian. El carbón residual se clasifica.
- La reactivación es la forma en que reciclamos el carbono. Es tratado en nuestros hornos a alta temperatura, liberando (dessorbiendo) los componentes que fueron adsorbidos en las instalaciones de los clientes. Nuestro laboratorio lleva a cabo controles de calidad antes de que el carbón se vuelva a colocar en otros filtros para los clientes.
- El tratamiento de los gases de combustión es la forma en que purificamos (quemamos) los gases, tratamos y recuperamos los componentes desorbidos del proceso de reactivación.
Todo el proceso es monitoreado continuamente, con la supervisión de las autoridades ambientales, asegurando que todos los componentes no deseados sean destruidos en este proceso.
Gracias a nuestro trabajo y a nuestra reactivación del carbono, reducimos las emisiones de CO₂ equivalentes a las producidas por 80.000 turismos al año.
- La reactivación es la forma en que reciclamos el carbono. Es tratado en nuestros hornos a alta temperatura, liberando (dessorbiendo) los componentes que fueron adsorbidos en las instalaciones de los clientes. Nuestro laboratorio lleva a cabo controles de calidad antes de que el carbón se vuelva a colocar en otros filtros para los clientes.
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Analizamos todo el carbono utilizado para saber qué componentes ha adsorbido y en qué concentraciones. Si no podemos reactivarlo, lo enviamos a centros de gestión de residuos especializados para su valorización segura.
La mayoría del carbón usado se puede reactivar. Los componentes adsorbidos se tratan en un proceso de dos pasos:
- Se destruyen en nuestros hornos, produciendo vapor de agua.
- El residuo se neutraliza mediante varias técnicas, dejando polvo y sales. Estos se recogen y se reutilizan o se eliminan.
Antes del tratamiento, el carbón residual se almacena utilizando medidas de seguridad pertinentes, como contenedores herméticos o cámaras térmicas. No hay riesgo de que los componentes se infiltren en el suelo o el aire circundante.
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De hecho, el carbón activado puede producir polvo inofensivo. Nos aseguramos de que nuestro personal trabaje siempre en condiciones higiénicas limpiando nuestras instalaciones de forma continua y en cada cambio de turno. Por supuesto, siempre proporcionamos al personal equipo de protección personal, como máscaras antipolvo, también para determinadas operaciones.
Filtramos el aire que se extrae de nuestras instalaciones, por lo que las emisiones contienen únicamente vapor de agua inofensivo y nada de polvo.
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Lo que ves saliendo de nuestras chimeneas es vapor de agua y aire; efectivamente, ¡nubes!
El vapor de agua proviene del carbón húmedo que reactivamos. Los hornos 3 y 4 tienen pasos de purificación adicionales, concretamente depuradores húmedos, y liberan vapor de agua adicional.
También hay pequeñas cantidades de residuos neutralizados de nuestro proceso de reactivación. Nuestras emisiones se mantienen bajo monitoreo continuo, por lo que sabemos que el carbono orgánico total (COT) es solo el 0,0003 % de las “nubes” que ves. Esto está muy por debajo del nivel que las autoridades medioambientales nos permiten emitir.
De hecho, nuestro trabajo y nuestra reactivación del carbono reducen las emisiones de CO₂ equivalentes a las producidas por 80.000 turismos al año.
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Utilizamos sistemas de medición certificados y calibrados que son ajustados, verificados y mantenidos por empresas externas especializadas. No podemos ajustarlos ni editar sus valores nosotros mismos.
Estos monitorean continuamente nuestras emisiones y transmiten los datos a las autoridades. Las autoridades regionales de Flandes (Bélgica) han establecido algunos de los límites de emisiones más estrictos de Europa y, en promedio, alcanzamos sólo una quinta parte de este nivel permitido.
Nos hemos asegurado de que nuestras emisiones sean lo más limpias posible invirtiendo en tecnología de punta que es única en nuestra industria. Además, como parte de nuestro compromiso con la sostenibilidad, llevamos a cabo investigación y desarrollo de nuevas tecnologías y sistemas para reducir aún más estos niveles.